Estamos a finales de noviembre y, un año más, ya está aquí el Black Friday. Este hito comercial se enmarca en el periodo que se inicia con Halloween, continúa el 11 de noviembre con el Día del Soltero —que empieza ya a desbordar el ámbito chino— y con el jueves de Acción de Gracias, y concluirá después con la temporada de Navidad.
En España, pese a ser uno de los países europeos donde más ha arraigado esta costumbre de origen estadounidense, todavía es poco conocido el origen de esta fecha. Es más, la denominación puede resultar chocante, ya que un “día negro”, en nuestra cultura, puede sonar a catástrofe. Nada más lejos de la realidad, sin embargo: este viernes se llama “negro” porque marca tradicionalmente el momento en el que las cuentas de los comerciantes, sometidos a una fuerte presión fiscal, dejaban de estar en rojo (en déficit) y comenzaban a arrojar beneficios.
En los Estados Unidos se celebra la cena de acción de gracias el cuarto jueves de noviembre, y es tradicional que el viernes sea semifestivo y marque el pistoletazo de salida hacia las compras navideñas. Las ofertas de todo tipo se encuentran ya entre las más agresivas del año y este día mágico se ha convertido en toda una semana, que comienza en las jornadas anteriores y se extiende hasta el llamado ciber-lunes, tras un fin de semana intenso en descuentos. Para este 2018 se pronostica un incremento muy fuerte de la facturación total, que sólo en los Estados Unidos subirá de sesenta mil a unos noventa mil millones de dólares respecto a 2017, es decir, alrededor de un 50% en un solo año. El año pasado, sólo en ese país, 174 millones de personas compraron por Black Friday.
El Black Friday rompe clichés
Quienes sigan pensando que este día de las compras por excelencia atrae sobre todo a las mujeres, tal vez deban reflexionar sobre ello, al menos a raíz de las encuestas de mercado estadounidenses. En efecto, los hombres decididos a comprar en este periodo superan ligeramente a las mujeres (77% frente a 71%) y además piensan gastar casi el doble: 626 dólares frente a 342.
Otro estereotipo que cae es el de la primacía de la compra individual para regalo: en este Black Friday se espera un auge de las compras en pareja. Además, la Generación X irrumpe con fuerza como el segmento etáneo más decidido a aprovechar las ofertas de 2018 (casi seiscientos dólares por persona), superando a la Generación Y, sobre todo, a la generación del Baby Boom, que queda muy por detrás con menos de doscientos cincuenta dólares por persona.
Consejos a tener en cuenta este Black Friday
Hoy te ofrecemos cinco consejos actualizados para comprar por Internet este Black Friday:
- Aprovecha las oportunidades iniciales, pero mantente alerta. Gran parte de los productos con gran descuento responden a stocks limitados, por lo que es importante estar alerta al principio del periodo, ya desde los días previos al Black Friday. Ya sabes que las buenas ofertas vuelan. Pero, al mismo tiempo, muchos grandes comerciantes irán liberando stock adicional en función de la marcha del negocio, y no olvides el ciber-lunes para el remate en productos digitales.
- Consulta los precios desde el anonimato. Como algunas tiendas emplean cookies para determinar el grado de interés del cliente y modificar los precios en función del mismo, puede ser útil abrir ventanas de incógnito para verificar el precio.
- Fija un presupuesto previo. Es conveniente fijarse un presupuesto total y consultar de antemano los productos que queremos comprar a precios de descuento. Un buen ejercicio es tener una lista de precios “normales” de todos los productos que aspiramos a comprar, y no dejarse llevar por los impulsos sino comprar racionalmente aquellos que realmente sean objeto de una importante reducción por el Black Friday.
- Atención a las compras extracomunitarias. Asegúrate bien de las condiciones de compraventa y aplicación de impuestos y aranceles cuando se trate de vendedores situados fuera de la Unión Europea. En particular, ten en cuenta que en algunos casos cabe la posibilidad de que debas acudir a la aduana para efectuar un pago adicional al retirar el producto. Como norma general, los aranceles son aplicables a partir de los ciento cincuenta euros.
- No bajes la guardia en materia de seguridad. Es una época de compras frenéticas debido al temor de que desaparezcan los chollos que tanto hemos esperado. Pero eso no debe hacernos bajar la guardia. Conviene recordar que las precauciones necesarias son las mismas que aplicaríamos al comprar en un establecimiento físico. Asegúrate de la garantía y las condiciones de devolución de cada establecimiento más allá de las normas generales de comercio electrónico, y compra principalmente en establecimientos reconocidos: la reputación es con frecuencia la mejor garantía de seguridad.
