A los consumidores nos gusta tener la certeza que nos otorgan las tiendas físicas: ver el producto delante de nosotros sin una pantalla de por medio, poder tocarlo, olerlo… porque de esta forma nos parece más real, más fiable, y nos aseguramos de que es exactamente aquello que andábamos buscando.
Una buena estrategia de marketing digital consigue romper esas barreras físicas y alejar los miedos y prejuicios de los clientes ofreciéndoles una experiencia única lo más cercana posible a la realidad.
Pero, ¿cómo conseguirlo? Todo es posible gracias a la implantación de una estrategia de Realidad Aumentada (RA), una tecnología que combina elementos de nuestro entorno físico con elementos virtuales (imágenes, animaciones, vídeos en 3D, etc.) para la creación de una realidad mixta a tiempo real por medio de la visión a través de un dispositivo tecnológico. Esto nos permitirá aunar lo mejor de los dos mundos, offline y online.
Por qué utilizar la Realidad Aumentada
La Realidad Aumentada supone una oportunidad para las empresas al aprovechar las ventajas que nos ofrece la tecnología creando nuevas experiencias publicitarias con múltiples beneficios y aplicaciones. Las dos principales son:
- Mejora la experiencia de los consumidores. Rompe las barreras físicas y da a los clientes una mayor seguridad en la compra de productos al permitirles interactuar con ellos y probarlos previamente sin tener que desplazarse. Un ejemplo son aquellas aplicaciones que simulan cómo nos sentaría un nuevo peinado, unas gafas, un sombrero, una camiseta… o las que nos ayudan a decorar nuestra casa mostrándonos cómo se ve la estantería que nos gusta junto a un manual interactivo que nos enseña cómo montarla.
- Crea una experiencia interactiva que ayuda a la fidelización y fomenta el engagement. Permite a los usuarios participar e interactuar con sus marcas favoritas de forma divertida. Gamifica el proceso en cierto modo: personajes de cromos que cobran vida, minijuegos que surgen de la interacción con el entorno, recorridos turísticos que permiten superponer información en los edificios históricos así como la recreación de los ya desaparecidos…
Las marcas se benefician de un mayor impacto y visibilidad al ofrecer experiencias con el objetivo de ayudar a los consumidores de una forma práctica en la vida real. Nuestro compañero Juan Manuel Zarza, diseñador y creativo de Carbonbyte, destaca las aplicaciones educativas que tiene la Realidad Aumentada: «Podemos hacer el proceso educativo mucho más atractivo y eficaz. Por ejemplo, los mecánicos pueden ver a tamaño real el funcionamiento de las piezas de un coche delante de sí mismos mediante animaciones 3D. O aplicado a la arquitectura con maquetas que cobran vida y muestran y explican las instalaciones eléctricas de un edificio». Es una forma original e innovadora de potenciar la experiencia del usuario en diversos ámbitos.
Dale vida y emoción a tus campañas en ‘mobile’
Si Mahoma no va a la montaña, la montaña irá a Mahoma. No podemos esperar a que los clientes vengan a nosotros, sino que tenemos que y podemos estar cerca de ellos. Nuestros posibles consumidores se encuentran muy cerca de sus dispositivos móviles, y ahí es donde debemos actuar ofreciéndoles algo que puedan y deseen compartir.
Imagina que pudieras interactuar con el producto que quieres comprar simplemente escaneando una imagen con la cámara de tu smartphone y al segundo tenerlo delante de ti. Es una sensación emocionante que hace más atractivo el producto.
«La Realidad Aumentada supone un valor añadido para los productos físicos al potenciar sus cualidades, permitiendo ampliar la información sobre estos con audio, vídeo o infografías en 3D interactivas. Las posibilidades son infinitas y cualquier marca o producto es susceptible de implementar este tipo de estrategias», nos cuenta Juanma. «Además, hoy en día estamos en continua interacción con nuestros teléfonos móviles, por lo que es muy fácil para las marcas alcanzar a los consumidores y más todavía si lo que ofrecen es algo divertido».
