A Internet le preguntamos de todo. Desde cómo ser felices hasta qué hacer si estamos aburridos. No es de extrañar, por tanto, que le confiemos también nuestras cuitas sobre salud, y es que, según el Informe Doctoralia sobre Salud e Internet 2015, un 90% de los internautas utiliza la red para buscar contenidos o servicios sanitarios. Además, este informe, que incluye datos de ocho países -entre ellos, España- pone de relieve que el 73% de los encuestados considera que Internet le ayuda a tomar decisiones beneficiosas para su salud.
Estos datos lanzan una señal clara hacia los profesionales del sector (proveedores de salud, compañías sanitarias, especialistas médicos…): en este 2016 ya no será posible subsistir dándole la espalda a Internet. Estén o no presentes en la red, esta terminará irrumpiendo en sus consultas de una u otra manera. Y lo hará a través de la proliferación de un nuevo tipo de paciente, el paciente 2.0, un individuo que ya no se conforma con obtener datos de una sola fuente y que ha incorporado Internet dentro de sus rutinas de ampliación y contraste de la información, también en el terreno sanitario.
¿Qué quiere el paciente 2.0 de Internet?
El informe de Doctoralia subraya que la actividad de búsqueda de información sobre salud en Internet se intensifica en dos franjas de edad, la de los 31-40 años y la de los 51-60 años. Esto se debe a que en esta época de la vida los individuos tienden a convertirse en “nodos de salud”, es decir, referentes para colectivos que están a su cuidado como los niños y los mayores. Por tanto, los usuarios persiguen obtener datos en beneficio propio y de terceros, y fundamentalmente relativos a las siguientes áreas:
- Enfermedades concretas (96%)
- Medicamentos (92%)
- Médicos y otros profesionales sanitarios (91%)
- Información sobre cómo llevar un estilo de vida adecuado para cuidar la salud (90%)
- Tratamientos o procedimientos médicos específicos (89%)
- Hospitales y centros sanitarios (80%)
- Seguros de salud (54%)
Cuando existen pacientes potenciales ávidos por documentarse sobre todas estas cuestiones, ¿por qué no estar ahí para dar una respuesta correcta y completa a sus preguntas?
Te están buscando… ¿y no te dejas encontrar?
Los profesionales de la salud en Internet tienen por delante dos tareas: la primera, dejarse encontrar por parte de los usuarios; la segunda, que cuando estos les localicen, hallen un sitio web útil y de calidad, que satisfaga sus necesidades y que, a la postre, les invite a confiar en el proveedor que está detrás. Ambos objetivos podemos conseguirlos a través del marketing online:
- SEO para el sector sanitario: según pone de relieve la responsable del Departamento SEO en Súmate, Ana Rodilla, el SEO es imprescindible en webs del ámbito de la salud para “estructurar adecuadamente el contenido e incluir las keywords que utilizan los usuarios para interesarse por los servicios que se prestan”. “Cuidar estas cuestiones permite una indexación adecuada por parte de los buscadores y un mejor posicionamiento dentro de los resultados de búsqueda, lo que hará que nuestro público objetivo llegue con facilidad hasta nosotros”, resume Ana.
- Inbound Marketing para el sector sanitario: con el SEO no se arregla todo. El trabajo de posicionamiento debe completarse con una estrategia de creación regular de contenidos de calidad adaptados las características de los pacientes objetivo; y un plan de Inbound Marketing que conduzca a la captación y fidelización de leads. Es decir, para que los usuarios confíen en los profesionales de la salud más allá de una consulta o un tratamiento aislado, y los conviertan en su referencia para la prevención y el tratamiento de trastornos crónicos en los que sean especialistas.
Responsabilidad social de los profesionales de la salud en Internet
Hacer marketing online reporta numerosas ventajas a los profesionales de la salud, pero también beneficia considerablemente a la sociedad. Es el ingrediente perfecto para cultivar la responsabilidad social de cualquier clínica, corporación médica o proveedor de servicios sanitarios, puesto que:
- Contribuye a expandir conocimientos veraces relacionados con la salud y a fomentar la conciencia de autocuidado entre la población (mantenimiento de estilos de vida saludables, adherencia a los tratamientos, etc.), así como el uso sensato de los servicios sanitarios.
- Promueve la prevención, complementando el trabajo que desarrollan los profesionales de Atención Primaria y amplificando el eco de sus actividades.
El paciente 2.0 ya está aquí. Que encuentre profesionales sanitarios 2.0 a su altura es solo cuestión de esfuerzo, planificación y una buena dosis de marketing online.
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