¿La sección “Etiquetas” de tu blog de WordPress es como ese armario que te da miedo abrir porque temes que te caiga encima un maremágnum incontrolable de ropa y zapatos? Entonces, has llegado al lugar perfecto. Hoy queremos armarte del valor necesario para que te lances, es decir, para que lleves a cabo una limpieza y reestructuración de las categorías y etiquetas (o tags) de tu blog, de manera que dejen de estorbarse unas a otras y empiecen a trabajar para proporcionarte un mejor posicionamiento orgánico en buscadores y, como consecuencia, mayor volumen de tráfico web.
Aunque lo hayas ido retrasando, es inevitable que te enfrentes cuanto antes al cajón de sastre en que se puede haber convertido la taxonomía de tu blog de WordPress. Llega el momento de que descubras que ese idílico jardín de conceptos que tienes en tu cabeza es pura mentira; y que la realidad se parece más a una jungla donde campa a sus anchas la incoherencia.
Problemas comunes en las categorías y etiquetas de tu blog de WordPress
Esta incoherencia se plasma en la proliferación de situaciones como:
- Que las categorías sean familia numerosa y las etiquetas se cuenten por millares, con un solo post asignado a cada una de ellas. Esto solo sirve para confundir a Google, dado que, por un lado, le estamos indicando que nuestro blog solemos hablar sobre un determinado asunto (etiqueta), cuando lo cierto es que solo lo hemos abordado en una ocasión… y no hay ni ganas de volverlo a tocar jamás.
- Que existan categorías y etiquetas con el mismo nombre. Nuestro compañero Antonio Salinero, del departamento SEO, explica que “cada vez que creamos una nueva categoría o etiqueta, se genera automáticamente una nueva URL dentro de nuestro sitio web”. Si establecemos una categoría y una etiqueta con la misma denominación, las URL de ambas competirán entre sí por destacar dentro de los resultados de búsqueda para una misma palabra clave. En esta pugna, “puede suceder que se posicione mejor la etiqueta, cuando probablemente lo que nos interese es conducir al usuario hasta la página de la categoría, donde generalmente tendremos más contenido y de mayor relevancia”.
- Que haya varias etiquetas apuntando a un mismo tema, pero con variaciones de número (singular y plural), con mayúscula y minúscula, con guion y sin él… Algo que, como comprenderás, resulta desconcertante para Google.
- Que aparezcan etiquetas de asuntos que ni remotamente se tratan en el blog… o nombradas con keywords por las que no nos gustaría que posicionase nuestro sitio web. Pongamos un ejemplo: imaginemos que tenemos un blog sobre fotografía, en el que publicamos posts sobre avances técnicos y exposiciones y trabajos de autores que consideramos interesantes. Un buen día creamos un artículo sobre una muestra de fotografías en el subsuelo, y le asignamos la etiqueta “alcantarilla”. En ese momento nos puede parecer muy lógico, pero rebobinemos. Si alguien busca “alcantarilla” en Google, ¿piensas que lo que quiere encontrar es nuestro post sobre la muestra de fotografía? ¿O más bien lo que quiere es un proveedor de tapas de alcantarilla, o información acerca del municipio murciano de Alcantarilla? ¿Nos interesa aparecer ante un usuario cuya intención de búsqueda no coincide en absoluto con el contenido que le proporcionamos?
Cómo reestructurar las categorías y etiquetas de tu blog de WordPress paso a paso
Antes de que empieces, te avisamos: reestructurar las categorías y etiquetas de tu blog, sobre todo si llevas años manteniéndolo, es una tarea ingente. Pero si te has visto identificado con alguno de los problemas anteriores, no puedes dejarlo pasar. Aquí te explicamos cómo llevarlo a cabo paso a paso:
- Efectúa un análisis de keywords… ¡sobre todo si no lo hiciste al principio! E, igualmente, te vendrá bien repetirlo para detectar si ha habido cambios en los hábitos de búsqueda de los internautas.
- Redefine tu listado de categorías y etiquetas basándote en este análisis. Lo ideal es que las categorías no sobrepasen la decena (mejor si se quedan en 4-6). En cuanto a las etiquetas, el número idóneo depende del sector y las características del blog, pero sé consciente de que, cuantas más tengas, más complicado te será gestionarlas. Unos pocos centenares (300-400) sería una cifra más que respetable.
- Si en tu blog participan varios colaboradores, es muy conveniente que compartas con ellos el nuevo listado de categorías y etiquetas y les des instrucciones claras para que no se salgan de él y no creen nuevas a su libre albedrío. Una buena opción es una hoja de cálculo en Google Drive, para que todo el mundo cuente con acceso en tiempo real a cualquier actualización.
- Ve ahora al CMS y empieza por las categorías. Renombra primero aquellas a las que hayas decidido rebautizar. Reasigna después los posts de las que hayas decidido borrar a su nueva categoría de destino. Y, finalmente, elimina las categorías descartadas.
- Repite ahora el proceso con las etiquetas. Este paso, probablemente, será mucho más tedioso, así que tómatelo con paciencia.
- Vuelve a las categorías y edita la descripción, el title y la metadescripción de cada una de ellas. Debes incluir información relevante y descriptiva acerca de los contenidos que se agrupan bajo cada una de las categorías.
¿Te interesa dejar las etiquetas de WordPress como indexables?
Finalmente, sería aconsejable que también editaras descripción, title y metadescripción de cada una de las etiquetas. Pero, antes de que te lleves las manos a la cabeza y resoples, deberías hacerte una pregunta: ¿te interesa mantener las etiquetas como URL indexables por el buscador?
Nuestro compañero Antonio recomienda, en líneas generales, dejarlas como no indexables con el fin de “evitar que se solapen contenidos y se generen duplicidades”. Por tanto, si te decantas por esta solución, no es tan necesario que rellenes la descripción, el title y la metadescripción de cada una de las etiquetas.
Para comunicar a Google la orden de que no indexe las URL de las etiquetas, basta con que vayas al apartado “Títulos y metas” dentro de tu plugin SEO (si tienes instalado Yoast, uno de los más habituales) y, en la pestaña “Taxonomías”, establezcas la opción “noindex” para las etiquetas.
Podrías, entonces, preguntarte qué sentido tiene crear etiquetas en tu blog si luego vas a pedirle a Google que no las indexe. Pues sí lo tiene, aun cuando actives este “noindex”. Un buen mapa de etiquetas te permite establecer una jerarquía interna dentro de tus contenidos y, en algunos plugins de WordPress, son las responsables del funcionamiento del módulo de posts relacionados, ya que el widget muestra propuestas que comparten tags con el artículo que el usuario está visualizando en ese momento.