La tecnología del Blockchain ha venido para quedarse, y lo mejor de todo es que aún están por descubrir algunas de las funcionalidades prácticas que puede llegar a adquirir (y el marketing online no va a quedar al margen de ellas). Por definición, “Blockchain” —o cadena de bloques— es una base de datos distribuida, pública y de carácter contable, formada por cadenas de bloques –o cadenas articuladas–, compuesta por nodos y diseñada para evitar eventuales modificaciones.
En otras palabras, una vez que un dato es publicado, se usa un sellado de tiempo (lo que forma un “bloque”) y ese resultado se enlaza a un bloque anterior. Esto implica que para alterar ese dato es necesario hacerlo con todos y cada uno de los bloques, hash (o funciones matemáticas criptográficas) y sellados de tiempo que hasta entonces se habían venido ejecutando. En la siguiente imagen podemos ver una representación gráfica de esta tecnología:
Como podemos observar, es imposible manipular la cadena de bloques, pues podemos modificar o hackear uno o dos bloques de datos, pero resulta impensable que se modifiquen decenas o centenares de ellos de forma simultánea. A eso, tenemos que unir la idea de que Blockchain es una cadena centralizada, formada por multitud de nodos (o sea, por ordenadores, tablets, smartphones, etc.), lo que viene a significar que, para que la red caiga, deben caerse a la vez y de forma paralela todos los nodos –cosa que es bastante difícil de conseguir, pues basta con que uno esté operativo para que la red siga activa–.
Otra de las ventajas que tiene Blockchain es que se trata de una red descentralizada, o sea, no depende de ningún Gobierno, Banco Central o entidad financiera. En conclusión, no existen intermediarios y los procesos que se llevan a cabo a través de él son más rápidos, eficaces y seguros.
Pero, ¿es posible adaptar el Blockchain al marketing online?
Cometemos un error importante si nos limitamos a decir que Blockchain solo se aplica para asegurar las transacciones de criptomonedas, tales como Bitcoin, Litecoin, Ethereum, Ripple, Dogecoin, Dash, o Iota, Bitcoin Cash, DeepOnion y Scolcoin. Por el contrario, Blockchain tiene un potencial práctico único que aún está por descubrir.
Una de las aplicaciones prácticas de esta tecnología afectaría de forma significativa a la manera de entender el marketing en los distintos motores de búsqueda, concretamente en lo que tiene que ver con SEO y SEM. En la actualidad, empresas como Google, Facebook o Twittter actúan como una central, un intermediario, en el sentido de que son el nexo de conexión entre los anunciantes y los medios digitales. Por tanto, para publicitar a través de SEM en un determinado medio es necesario hacerlo a través de un intermediario.
Con la tecnología Blockchain esa dependencia e intermediación desaparecería puesto que el negocio se haría sin terceros, aportando así al proceso mayor rapidez, eficacia y ahorro económico. Pero afirmar eso implica a su vez que la manera de realizar posicionamiento SEO cambie notablemente: las propias páginas web también tendrán que incorporar Blockchain, siendo la consecuencia más inmediata que los desarrolladores de SEO tengan que utilizar protocolos que incorporen la cadena de bloques en cada transacción.
Otra de las funcionalidades de la cadena de bloques podría afectar a la forma de publicitar. Blockchain se ha venido entendiendo como una tecnología que avanza hacia la democratización de Internet. En otras palabras, consagra a cada usuario como titular y responsable de sus datos, pero a la vez permite que este elija la publicidad que quiere recibir conforme a sus gustos personales. De esta forma, podría acabar con la publicidad intrusiva, o al menos limitarla.
Junto a ello, Blockchain aportaría mayor seguridad al proceso de compras online y de e-commerce. La razón es que permitiría al destinario final conocer todo el proceso de producción del producto o servicio, desde su fabricación hasta su distribución final. Se aportaría, así, mayor confianza a la hora de realizar transacciones económicas y se acabaría con el posible miedo a las estafas o a las falsificaciones. Aumentaría, sin duda, la aplicación de políticas de marketing online a nivel empresarial.
Finalmente, esta red descentralizada formada por nodos aportaría mayor eficacia en los procesos de verificación de usuarios. ¿Has imaginado alguna vez navegar por Internet y que no haya trolls? En parte Blockchain acabaría con el anonimato en la Red, pues cada usuario estaría sujeto a una identidad personal, única e intransferible. Aquí, ya entraríamos en el famoso debate: ¿debemos ponerle puertas al campo?
En este vídeo de RTVE se explican las aplicaciones prácticas del Blockchain.
Lo que está claro es que el Blockchain revolucionará el marketing digital en 2018, puesto que traerá cambios significativos a nivel de posicionamiento natural de buscadores y posicionamiento SEM, a nivel de publicidad en páginas web y en materia de comercio electrónico. En cambio, estas novedades deben venir acompañadas del fomento de la innovación y la investigación, no sólo empresarial sino también a nivel institucional. Necesitamos una Red segura, en la que confiar y en la que nuestros datos personales no sean tratados sin consentimiento. Blockchain ha venido para quedarse.
