No hay una fórmula mágica para elaborar el anuncio perfecto. Tanto los internautas como el propio Facebook evolucionan constantemente. Son dinámicos y siempre buscan algo nuevo con lo que llamar la atención. Puede parecer complicado pero, la experiencia unida a una serie de cuestiones atemporales (hay cosas que por suerte siempre van a servir), nos ayudan a optimizar los recursos de nuestras campañas en Facebook.
Cómo os comentamos en Por qué y cómo promocionar tus publicaciones en Facebook el alcance orgánico que puede tener una publicación en Facebook es bastante limitado y escaso. De este modo queda en evidencia la necesidad de realizar campañas publicitarias. Y es por ello que os vamos a dar una serie de consejos en relación a los dos elementos fundamentales de un anuncio: el texto y las imágenes.
Texto
Con el texto de los anuncios buscamos exponer de forma breve, concisa y atractiva lo que ofrecemos. Tenemos que hacer entender nuestro mensaje a todo aquel que vea el anuncio y rápido, puesto que los internautas cada vez prestan menos atención. Para ello podemos seguir las siguientes pautas:
- Titular llamativo. Destacar siempre (en el titular o en el cuerpo) nuestras ventajas competitivas: envíos o devoluciones gratuitas, entrega en 24h, ofertas y descuentos en activo… Y si tu marca es conocida, asegúrate de incluir tu nombre.
- El texto debe ser corto (unas 2-3 líneas) y preciso. El mensaje que transmitir tiene que quedar claro.
- Hay que incluir siempre una llamada a la acción al final del texto como por ejemplo puede ser: infórmate, contrátalo ahora, descárgatelo gratis…
- Por último, no podemos olvidar un enlace (URL) a la web o página de destino. Si la URL es demasiado larga, algo confusa o, hablando claro, es fea podemos cambiarla y acortarla para que sea más agradable a la vista y sea de utilidad a los usuarios con herramientas como Bitly.
Imágenes
Las imágenes en un post promocionado o anuncio son muy importantes. Es lo primero en lo que se fijan los internautas y tendremos que usarlas para llamar su atención y conseguir que se animen a leer el texto. Existen ciertas especificaciones y buenas prácticas para aumentar la eficacia de los post con imágenes:
Una vez superados los requerimientos técnicos, tenemos que atender a la estética de nuestra publicación, pues el conjunto es igual de importante y puede suponer la diferencia entre el éxito o el fracaso. Imagina que anuncias un máster sobre economía, ¿pondrías a un jardinero en la imagen? Y si ese máster va a ser publicitado en China, ¿tendría sentido que los modelos de la imagen tuviesen rasgos occidentales? Parecen preguntas retóricas, pero la verdad es que muchas veces olvidamos aplicar sus respuestas, pues las imágenes siempre deben ir en consonancia con estas tres cosas:
- Con el producto, servicio o información ofertada.
- Con el texto del anuncio.
- Con la segmentación de la audiencia a la que va dirigida.
Además, la identificación con el anuncio es clave para atraer la atención de los internautas. Por ello, usar imágenes con personas (1 o 2 que se encuentren interactuando y con actitud positiva) las hace mucho más potentes, lo que mejora el engagement y consigue más conversiones.
Prueba y error
Las costumbres de las personas cambian al igual que las modas. Lo que un día fue motivo de éxito puede que se haya quedado anticuado. Y siempre aparecen nuevas formas de publicidad a la espera de ser probadas.
Cuando Facebook lance un nuevo tipo de anuncio, pruébalo. No asumas de forma tajante saber cuál es la mejor imagen o público para una campaña. La clave para conseguir una campaña exitosa a lo largo del tiempo es realizar pruebas constantemente: inténtalo con imágenes diferentes, textos, segmentaciones… solo así alcanzarás el máximo rendimiento posible. ¡Innova! Y si te equivocas: aprendes.
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